Monday 12 February 2007

En ninguna direccion

Yo en realidad, me considero una tia moderna y bastante avanzada tecnologicamente. Cuando las circunstancias lo pedian, y dando la espalda a mi natural espiritu rebelde y un poco suspicaz, me arme de valor y me compre un movil. Cuando me compre mi super dupa portatil, una mujer muy sabia, muy valiente y a la que admiro mucho me dijo que una vez lo tuviese, no iba a saber como habia sobrevivido hasta ese momento sin uno. Oye, pues dicho y hecho, aqui estoy, enganchada total.

Hay uno que se me escapa, de hecho, yo nunca he visto uno, de cerca quiero decir. Los he visto apostados en los tableros de otros, generalmente de esos carros pretenciosos, obscenos y anti-mundo, conducidos por señores con complejo de inferioridad o con un aparato minusculo o por señoras con suficiente laca en el pelo como para desafiar las leyes de los vientos huracanados o con una inseguridad ciudadana propia de un discurso de derechas. Tambien los he visto en los tableros de aquellos que hacen del carro su vida, o mas bien que dependen del carro para vivir, en estos supongo es un aparato practico, util y que hace la vida diaria mas facil.......pero a costa de que? Como otros aparatos a los que debemos agradecer su existencia a la inteligencia militar, el aparatito del cual hablaba Maruja Torres en el articulo del mismo titulo, el gps, a mi en realidad me da un poco de miedo. Llamadme irracional, llamadme fan fan de Surveiller et punir de Foucault o la teoria de la conspiracion, o lo que sea, pero hay dos cosas principales por las cuales no solo no me gusta sino que ademas me disgusta profundamente el aparatito en cuestion, porque como bien dice Maruja : Por el simple hecho de utilizarlo se les comunica a todos los servicios secretos que corresponden dónde nos ubicamos nosotros, por un si acaso; aunque un movil o incluso una cuenta de internet a fin de cuentas en eso son iguales....
Pero la segunda, es en realidad la mas importante. Ahora que nadie salvo los marcianos se sabe el numero de telefono de nadie gracias al movil, todos estos aparatitos, si si nos hacen la vida mas facil pero [..]
así, poco a poco, pero inexorablemente, vamos dejando de
discurrir. Y se nos ayuda a transcurrir sin más. De aquí para allá y de allá
para aquí. Que es de lo que se trata.

Por eso, llamo a la rebelion de los mapas y los libros!

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